Breves


sábado, 2 de mayo de 2009

Wikipedia, o como ahorrar tiempo y dinero.

La biografía de Motörhead que me prestó Valent ha sido bastante decepcionante. Una pila de datos sobre cuando grabamos tal disco, como, con quien en los controles, que productor, que técnico y por donde nos fuimos de gira. Un par de anécdotas, como por ejemplo que un soplapollas yugoslavo intentó matar a Lemmy, o sobre lo mamón que es Brian Robertson, para acabar con un "Motörhead son lo que siempre han sido: Un grupo formado por fans que finalmente ha encontrado una formación estable y que avanza con ella paso a paso, y blablabla, ojalá duren siempre".

Esto es putamente decepcionante sobretodo por el hecho de que omite casi la absoluta totalidad de salvajadas que un dios del rock de la talla de Lemmy Kilmister ha podido hacer a lo largo de su vida (y las que sigue haciendo). Ese tío tiene exactamente sesenta y cuatro putos años, y mientras la gente de su edad está haciendo números para prejubilarse con la mayor pensión posible, Lemmy sigue de escenario en escenario, con su bajo Rickenbaker, su voz hecha mierda, sus botellas, drogas y mujeres. Sencillamente, me abruma la posibilidad de estar ante un hombre que vive así, y lo admiro. Es fiel a su estilo, a su modo de vida, a su rollo, y no importan modas, mierdas o lo que cojones sea: We are Motörhead! We play rock 'n' roll.



Phil Campbell a la guitarra, haciendo el trabajo de dos hombres desde que Würzel se piró, Micky Dee a la batería que no aceptó su puesto hasta la tercera o cuarta vez que Lemmy le ofreció su puesto, y finalmente, su santidad Ian "Lemmy" Kilmister, bajista y vocalista de una de las bandas de Rock en activo más míticas y duras que hay.

Por cierto, me molesta especialmente que el mamón de Miguel.Asturias no pare de hablar de Lemmy como "Lem'" como si fuese el tío con el que se toma las cervezas a la salida del tajo, cuando ni siquiera explica de donde viene el apodo de Lemmy.


Así pues, no compréis "Sin Remordimientos", ya que es como querer fumar y empezar por aspirar el humo que expulsa tu vecina la cuarentona salida que fuma mentolados. Si quieres fumar, hazlo bien y empieza por la maría más salvaje que puedas encontrar.



White Line Fever (si: El título se refiere al ansia por meterse una raya de coca) es la autobiografía de Lemmy. En cuanto me haga con él, ya os contaré que tal. Si no podéis haceros con él, tenéis estas tres salidas:


http://es.wikipedia.org/wiki/Mot%C3%B6rhead

http://en.wikipedia.org/wiki/Mot%C3%B6rhead
http://gl.wikipedia.org/wiki/Mot%C3%B6rhead

En español para gente que no quiere pensar, inglés para los que quieren toda la info, y gallego, porque me hizo gracia verlo. Os ahorraréis un libro que tiene unas 10 anécdotas interesantes en total, y unas cuantas fotos interesantes.

Por lo demás, ahora estoy leyendo una nueva autobiografía, titulada "Los trapos sucios", y es nada menos que la de Mötley Crüe.



No me había sentido así desde algunas historias de Castelao, del estilo de "Os vellos non deben namorarse". Es un fatalismo atroz, salvaje y despreocupado, con narcóticos, sexo, violencia y miseria humana. Estoy en esa parte de todas las historias en la que ves que todo se pone chungo, y esperas a que el protagonista haga algo para superar la situación, pero notas por como lo cuentan que no han llegado al fondo. Puedes sentir los rencores que se guardan, y como van saliendo a medida que avanzan al escribir la obra. Puedes ver como empiezan contándote como algo gracioso como Vince Neil se tiraba a diez tías en una sentada, pero luego va yendo a peor a medida que surgen momentos en los que degradan a grupies, hacen putadas a otros grupos o la lían salvajemente, con la clara idea de que no van a pagar por ello. Nikki Sixx abusaba de las drogas o las personas como le daba la gana, Tommy Lee era un iluso, bobalicón y juerguísta, a medio camino entre la vida de Vince llena de sexo y la de Nikki, llena de drogas. Siento compasión por Mick Mars, y su vida llena de errores y puteada de antemano por una enfermedad ósea degenerativa. Es decir... Miradlos antes:



De arriba a abajo, de izquierda a derecha: El vocalista depredador sexual, el guitarrista de aspecto oscuro y reservado, el bajista que convierte la palabra "politoxicómano" en un eufemismo y a Steven Tyler en un predicador abstemio y por último el tío que se tiraba a Pamela Anderson.

Ahora mirad como están:



De izquierda a derecha: Nikky, Vince, Mick y Tommy. ¿A que cuesta creerse que el tío achaparrado, bajito y pálido es el que menos mierda se ha metido en el cuerpo?
Sigo leyendo, gente, y os contaré. Pero ya os digo: Estoy flipando. Este es de esos libros que cambian la vida de uno, y yo estoy viendo como esas anécdotas salvajes y graciosas del Hotel Hyatt, de hacer salvajadas propias de un dios del rock y esas cosas tienen un punto, como una línea pintada en el suelo, a partir de que las cosas entran en un nivel "jodidamente no gracioso".

Ah, también aprendes que Blackie Lawless es un soplapollas.

En cualquier caso, es un libro que recomiendo a todo el mundo que crea tener estómago para ponerse en la piel de cuatro jóvenes venidos de ninguna parte que a los dieciocho vivían entre ratas, cucarachas, botellas y mugre, y al año siguiente vivían excesos que nadie habría podido imaginarse aunque estuviese pasado de ácido y leyendo siete ediciones distintas de la biblia negra.
Por mi parte, sigo leyendo... Ya os diré.

Semper fi.


Ukio

4 comentarios:

Lectora de cómics dijo...

Joe, mira que Mötley Crüe no me parecieron tan duros (aunque sabía que no tenían una vida santa) pero leyendo esto parece que son lo puto peor XDDDDDD
Ya contarás anécdotas.

Lucas Proto dijo...

A mi los Motley me parecieron rajadamente buenos cuando los vi en concierto, y eso que fui solo conociendo una canción. El guitarrista con la enfermedad osea es acojonante y muy siniestro, hacia una cosa chunga con los pies, doblándolos de una forma extraña y daba muchísima grima.

Habrá que pillarse el libro, pinta bien lo que cuentas.

Nmogadah dijo...

Ya te dije que la biografia no era gran cosa. A mi tambien en su momento me decepcionó gran cosa.

Astaroth dijo...

Habrá que bajar algo de los Motley entonces. Ya, aunque me encuentre de morros con la biografía de Motorhead, sabré que no debo cogerla.