Recuperando el respeto

Uno de mis directores de cine favoritos, hasta hace más o menos cinco años era Guy Ritchie. Era novedoso, genial, inteligente y tenia un humor endiablado, con el que logró una llamada de Brad Pitt pidiéndole un papel en su próxima película. ¡Uno! ¡El que fuese!

De ahí salió el campeón gitano de boxeo sin guantes.



(Fijaos en que está al lado de un Jason Fleming que prácticamente parece sacado del polígono de al lado de mi casa).

Otro personaje brutalmente genial es Top el Ladrillo, interpretado por el genial Alan Ford. Uno de los mejores malos que ha visto el cine en mucho tiempo.



¿Y que vamos a decir de Tony dientes de bala? Hay infinidad de escenas o diálogos que podemos citar tanto de Snatch: Cerdos y diamantes, como de Lock & Stock & two smoking barrels que podría hacer durar esta entrada siete eternidades. Sin embargo, nuestro amigo Guy cometió el error de su vida: Casarse con Madonna.

Sinceramente, me creo todo: Me creo todas las noticias que dicen que ella es controladora, manipuladora, obsesiva, ambiciosa... Debe de ser un bicho, un terror, el capitalismo con cuerpo de mujer. Ella dice que tenía que haberse casado con un hombre más fuerte, más inteligente, más ambicioso, y más espiritual... Como ella. El dice que ella es vieja, fea y arrugada. Seguro que cuando lleva tiempo sin hacer una gira, lo es. Seguro que cuando falta dos días seguidos a aerobic parece una rajada pasa de california, y seguro que tiene tanto botox encima que no puede ni masticar sin que su cara se reconfigure como una cama elástica con un elefante encima.
Que se joda.

La cuestión, es que Madonna si que es dominante, opresiva y muy hijaputa. La última película de Ritchie que recibió una promoción mínima fue Barridos por la marea, protagonizada por... ¡Si! ¡La ídolo de las locas! (La imagen del mayor bar de gays de Coruña lleno de gente vestida de Madonna en ropa de aerobic en carnavales es algo cuyo único adjetivo posible no será inventado hasta que H.P.Lovecraft se reencarne).
(Por cierto, os recomiendo encarecidamente que visitéis el mayor local de gays de vuestra ciudad en carnavales. Risas aseguradas. Y desde aquí aprovecho para mandar un saludo a Jerjes).

He descubierto hace escasos minutos gracias a IMDB que hizo dos más, Revolver y RocknRolla. Aprovecharé para verlas a la primera ocasión, pero sin muchas esperanzas, todo hay que decirlo.

Incluso, la tiranía de Madonna llegó hasta las mayores cuotas de lo imaginable. Las imágenes hablan por si solas:



¿No lo ves? ¿No sabes que es? Te lo pondré fácil.



¡O! ¡EME! ¡FUCKING! ¡GE!

¡Suputamadren! O yo soy un malpensado o ahí pone "Penetrator". Esa guarra había ultrajado lo más sacrosanto de un hombre: ¡Su ano! Podríamos decir que estaban dando por culo al talento de nuestro afamado director de cine, reconvertido a putillo.

Pues bien, damas y caballeros, la vida da vueltas, las cosas cambian, y como podemos ver si buscamos otras fotos del utensilio (fotos que no he subido porque les habían puesto una firma con photoshop), veremos que esa manita es chunga, tensa y llena de asquerosas venas. ¿A que da asco? ¿Por que? Porque pertenece a una vieja, gorda, fea y arrugada. Todo esto, dicho desde la cita textual de las palabras del señor Ritchie, que por cierto, ha recuperado mi respeto, o por lo menos, parte de él: Se divorcia. ¿Y como te divorcias de alguien cuya fortuna asciende a 350 millones de € y que te ofrece 25 kilos para que no reclames lo que en verdad te toca: El 50% de toda la pasta que haya ganado en los últimos ocho años? Pues con dos cojones, diciéndole que se meta las pelas por el culo, y que te quedas con la mitad de la cuestodia de los niños.

La verdad es que viendo la foto del strap-on, pudo haberla pedido toda, pero bueno...

Felicidades por volver a la masculinidad, Guy. Ahora, vuelve a hacer pelis que molan y habrás recuperado mi respeto del todo.


Semper fi.

Ukio